Creo que ya iba siendo hora de volver a ser la persona adecuada, esa que es igual con todo el mundo y esa a la que le importa un pimiento si a alguien no le gusta su forma de ser.
Después de tantos problemas, he reaccionado, tarde, pero lo he hecho y pienso que todo lo que hice, lo hice mal. No debí portarme tan bien con gente, que no vale la pena, por gente que lo único que quieren es hundirte y verte llorar.
Por suerte, ha empezado una nueva etapa, un nuevo comienzo para ese mal final y ahora, estoy a gusto conmigo misma, llego todas las mañanas al instituto y no veo caras de mala ostia, sino sonrisas, me reciben con abrazos, con efusividad y lo echaba tanto de menos, que parece que han pasado siglos desde la última vez que me pasó.
Estoy orgullosa de mi, no soy la misma idiota de antes y ahora estoy segura de que esa idiota, no va a volver, ha desaparecido y no queda ni rastro de ella.